Coin Press - "Vamos a aguantar": el optimismo de los mexicanos en la frontera pese al látigo de Trump

"Vamos a aguantar": el optimismo de los mexicanos en la frontera pese al látigo de Trump
"Vamos a aguantar": el optimismo de los mexicanos en la frontera pese al látigo de Trump / Foto: Guillermo Arias - AFP

"Vamos a aguantar": el optimismo de los mexicanos en la frontera pese al látigo de Trump

En una fila sin fin para cruzar de Tijuana a Estados Unidos con su tráiler, el camionero Juan Diego Mendoza reconoce que los aranceles que Donald Trump impuso a México afectarán su trabajo, pero lo asiste otra convicción: "Vamos a aguantar".

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Mendoza salió más temprano de lo habitual de la cajuela del camión donde duerme para conocer la respuesta de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, al impuesto de 25% que Trump puso a las exportaciones de su principal socio comercial a partir de este martes.

Este conductor de 31 años le da la razón a la presidenta de esperar hasta el próximo domingo antes de anunciar su respuesta, en el Zócalo capitalino, principal plaza pública de México.

"La presidenta lo está manejando de manera inteligente, sin exaltarse, ni dejarse provocar por la prepotencia de Trump que se siente el dueño del mundo", dijo Mendoza a la AFP en la garita de Otay Mesa.

Por este puerto de Tijuana cruzaron casi un millón de camiones entre enero y noviembre de 2024, según cifras oficiales.

El arancel "va a afectar, pero vamos a aguantar", remarcó Mendoza con gesto de orgullo, mientras calentaba el motor del tráiler en el que transporta carne desde Estados Unidos a México.

La decisión de Sheinbaum de anunciar sus medidas arancelarias en un acto masivo "manda un mensaje de unión" y amplía el margen "para encontrar una solución negociada de último minuto", señaló Diego Marroquín, especialista en comercio del Wilson Center.

- "Está bajando el trabajo" -

Mendoza ya siente el impacto de las medidas proteccionistas, que Trump justifica en una supuesta inoperancia de México y Canadá -sus socios en el T-MEC- frente al tráfico del letal fentanilo y la migración ilegal en esta porosa frontera de 3.100 km.

Debido a los mayores controles ordenados por Sheinbaum en la zona limítrofe, este chófer y sus miles de colegas tardan hasta cinco horas en cruzar el puerto donde los vehículos son escaneados con rayos X.

La mandataria, cuya popularidad ronda el 80%, ordenó en febrero el despliegue de 10.000 soldados a cambio de que Trump retrasara los aranceles.

Pero la medida apenas alcanzó para un mes, y el tiempo de espera en la garita está reduciendo los viajes y las utilidades de las empresas transportistas.

Aun cuando las tarifas recién se empiezan a cobrar, Ángel Cervantes, camionero de 28 años, también resiente el golpe, supuestamente por el castigo a China, país al que Trump impuso aranceles de 20%.

"Está bajando el trabajo porque la mayoría, el 50% de las empresas de Tijuana, exportan material chino. Y como los aranceles también son hacia China, baja el trabajo para las compañías" de transporte, señaló.

La empresa para la que trabaja Cervantes perdió un cliente que exportaba aires acondicionados chinos.

Se trata de empresas de capital chino instaladas en México.

"De dos cargamentos diarios pasó a uno, luego a uno por semana y a uno cada quince días, hasta que paró", relató Cervantes, cuyos ingresos bajaron de unos 800 a 600 dólares semanales para sostener a su esposa y dos hijos.

Pese a ello, confía en que el intercambio comercial del T-MEC, de unos 776.000 millones de dólares al año, "se mantendrá" por la profunda interdependencia.

- Aguante -

Antes de la entrada en vigor de los aranceles, como una señal a Trump, la presidenta mexicana anunció un plan de sustitución de importaciones chinas.

El trailero Jonathan Figueroa, de 26 años, cuenta que uno de los principales clientes de su anterior empleador decidió trasladar su planta de paneles solares de México a Estados Unidos, y él perdió su trabajo.

"Me había dicho mi patrón que si ganaba la presidencia Donald Trump, la empresa a la que surtíamos se la iban a llevar para Nuevo México. Y así fue", relató Figueroa, quien pasó cuatro meses desempleado.

En ciudades fronterizas como Tijuana -de dos millones de habitantes- los aranceles también causan preocupación en la pujante industria manufacturera.

Luego de terminar su turno de 12 horas en una maquila de parlantes para autos de una reconocida marca, María Virginia Gutiérrez admite su "preocupación", especialmente desde que la fábrica pasó de manos estadounidenses a un inversor chino a comienzos de año.

Aunque en Tijuana muchos son conscientes de que los aranceles y la respuesta de Sheinbaum tendrán repercusiones negativas, también hay espacio para el optimismo.

"Tenemos que defendernos. Somos económicamente fuertes y autosuficientes. A diferencia de ellos, no buscamos el carro del año ni el mejor corte de carne, somos felices con un plato de frijoles y un huevo", dice Juan Diego Mendoza.

D.Avraham--CPN